Comissió de Baix - La Pobla de Farnals 2007

Comenzó nuestra andadura allá por los endes de "La Creu" en el año 2007, cuando "Bolero" y "Tagarnino" fueron los elegidos por la Comissió de Baix, para ser exhibidos en las calles de su recinto taurino.

"Bolero" un astado muy bien hecho, bajo, armónico y bien puesto de pitones, pertenecía a la ganadería de Buenavista y marcado con el nº 71, fue el que asumió el papel de cabeza de cartel y "Tagarnino" un semental de la ganadería de El Torero, de hechuras inmejorables (por algo ostentaba ese cargo en una casa ganadera de semejante calibre), telonearia al anteriormente nombrado.



El día 8 de Septiembre tras la entrada de cajones y posterior parafernalia de colocación, fue "Tagarnino" de la ganadería de El Torero, negro mulato y marcado con el nº 110, el primero en saltar al asfalto de las calles de La Pobla Farnals. El toro se mostró bravo en todo momento repitiendo en sus embestidas y entrando con fuerza, pese a transcurrir casi toda su exhibición en la zona de asfalto, con el consiguiente castigo y desventaja para el animal. Fue a los veinte minutos aproximadamente de estar en la calle, cuando en un desgraciado lance en el centro de la plaza, el astado resbalo de las cuatro patas y cayó con todo su peso sobre la superficie de terrazo, dañandose ostensiblemente uno de sus pitones, posteriormente al levantarse acudió a una casa con barrotes donde derrotó lastimandose definitivamente el asta, por lo que fue rápidamente encerrado, con la ayuda de Alejandro, que tiró magistralmente del toro hasta los toriles. Seguidamente se dió suelta a "Bolero" de la ganadería de Buenavista, negro y marcado con el nº 71, toro bravo y noble, que hizo una salida electrizante respondiendo siempre con clase a todos los que lo citaban, posteriormente tras recorrer gran parte del recorrido llegó a la arena, donde se emplazó y comenzó a coger sentido.


Foto: Oscar Usó


Ya por la noche y al haberse dañado el asta "Tagarnino", tansolo se llevó a cabo la embolada de "Bolero" que tras una rápida embolada y cortada de cuerda, nos brindo una exhibición de un alto nivel, confirmando lo que había marcado ya al final de la tarde, esta vez, el toro se fue a las calles, se creció y comenzó a exigir a los rodadores que con el se enfrentaban, viéndose muy buenas rodadas de poder a poder.